Scutosaurus

(«Lagarto escudo»). Su nombre se refiere a grandes placas de armadura esparcidas por su cuerpo, era un reptil anápsido grande que, a diferencia de la mayoría de los reptiles, sostenía sus patas debajo de su cuerpo para soportar su gran peso.

El cráneo de este animal era bastante grande, tenía un pequeño cuerno óseo sobre el hocico, y dos pequeñas protuberancias a los lados de la cabeza, formadas por los huesos de las mejillas que se prolongaban en dirección diagonal, un collar óseo en la parte trasera del cráneo que tenía pequeñas espinas óseas. Sus mandíbulas eran débiles y redondeadas, y contaban con numerosos dientes pequeños en forma de hoja, y estos dientes estaban situados a lo largo de toda la mandíbula hasta el paladar. Ambas patas tenían cinco dedos con garras enormes y afiladas que el Scutosaurus utilizaba para excavar y para defenderse de los depredadores. La cola del animal era bastante corta, como la de las tortugas.